martes, 20 de julio de 2010

Sombreros que vuelan. Mojitos de día. Un mar que susurra. Orillas que mojan los pies. Moreno pasajero. Sonrisas de prestado. Miradas en un viejo vagón. Música de fondo. Tus cartas y las mías, aún por jugar. Brisa marinera. Sol en la cara. Arena en los bolsillos. Silencios que hablan. Palabras que no escucho. Trenes que marchan. Sensaciones que vuelven. Nuevos horizontes. Las autopistas del presente. Los caros peajes del pasado. Cafés con hielo. Patatas bravas. Frases a medias. Pelis antiguas. Casas ajenas. Barcelona a nuestros pies. Nosotros, el cielo. Tabaco liado. El eco de un piano. Cosquillas en la barriga. Pintalabios rojo. Viajes improvisados. Abrazos de porcelana. Amaneceres desolados. Tequilas sin rumbo. Tus sueños, a medias. Los míos en tus ojos. Tus manos, calladas, buscando las mías de reojo.

domingo, 18 de julio de 2010

Tenía miles de cosas en su presente, creando aquella utopía que siempre soñó en sus paseos por las calles de lo que era hoy la ciudad olvidada; las ruinas de su pasado. Sólo ahora advertía que en el momento de diseñar sus sueños olvidó por completo las cuatro cosas más importantes. Y ahora, como el peor de los males, la incertidumbre sobre su vida la cegaba, dañando hasta las entrañas su vulnerable mirada infantil…